jueves, 31 de marzo de 2011

0110331

Me vas a encontrar en la vereda en que no dé sol. Caminando precavida, manos en los bolsillos y mirada perdida sonando alguna canción. La semántica en las venas y la epistemología fallando a cada paso que vaya dando. Voy a jugar con sombras frenéticas y deformes alrededor mío, intermitentemente, ellas van a ser dueñas de mis secretos. En otoño se acabaron las margaritas para deshojar y el corazón se declaró en huelga hasta la primavera. El empirismo no resultó que un fracaso y humo de progreso, el tiempo circular que sólo se acumula en una vuelta de reloj. Mi cabeza piensa en lo Absoluto, su némesis el Destino y se empieza a incendiar, el angel perdió las alas con tu foto impresa en la mesa de luz y la despedida. Y de noche voy a mirar mi cielo, que va a ser tu cielo y que quizás también estés mirando conmigo y entonces me voy a sentir menos sola porque te voy a sentir conmigo en ese cielo que alguna vez no fue ni mío ni tuyo, pero nuestro.






Soledades (fragmento) por Mario Benedetti: "Conforme... pero qué vendrá después de la soledad. A veces no me siento tan solo si imagino, mejor dicho, si sé que más allá de mi soledad y de la tuya otra vez estás vos, aunque sea preguntándote a solas qué vendrá después de la soledad."

2 comentarios:

yo quiero saber...